El diario El Mundo ha publicado una noticia en la que explican la crisis del conejo, haciendo hincapié en la caída del consumo y de los precios. Recogen las declaraciones de Diego Yuste, de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), en las que recalca que «los ganaderos tienen poco control sobre el precio final, la gran distribución lo usa como reclamo y se hunde el coste».
Sobre los costes de producción, el artículo explica que al ganadero se le paga poco por un producto cuyo precio va aumentado en la cadena de distribución, afirmando que en el campo se paga 1,49 euros por kilo de conejo y que los costes de producción se elevan a 1,85 euros, por lo que el ganadero pierde dinero. Sin embargo, cuando llega a las tiendas, el precio de esta carne se ha triplicado.
En cuanto a la piel, UPA explica que antes los ganaderos vendían la piel de conejo para fabricar prendas al sector textil y se pagaba bien, «compensaban el descenso del consumo». Pero ahora la situación ha cambiado totalmente por la entrada en juego del gigante chino.
«La piel se vende cada vez menos y más barata», denuncian. «El precio ha caído casi un 90%. Si antes se pagaba un euro, ahora los criadores sólo reciben 10 céntimos», explican. Todos estos elementos han llevado a las explotaciones a acumular pérdidas de 42 millones de euros en este periodo, según la estimación de la Unión de Pequeños Agricultores que recoge el diario.