De momento son 119 personas muertas y 54 heridas el balance de un incendio en el matadero avícola de la ciudad de Mishaze perteneciente a la empresa cárnica “Jilin Baoyuanfeng Poultry”, ubicada en el noreste de China según la agencia oficial China, desconociéndose aún el número de personas desaparecidas.

El incendio se declaró alrededor de las seis de la madrugada hora local y en ese momento habían 350 trabajadores en el interior del matadero, de los que una buena parte de ellos consiguieron escapar a pesar de estar cerrada la puerta de emergencia de la planta con llave cuando se declaró el incendio. Según testigos era habitual cerrar todas las puertas para que nadie pudiera salir cuando se trabajaba.

Los equipos de emergencia desplazados (unos 500 bomberos y 270 médicos y enfermeras) se encontraron con una complicada y laberíntica estructura interior y unas minúsculas puertas de salida que han dificultado mucho las labores de rescate y sofocación del incendio.

Los bomberos sospechan que el fuego se debió a una explosión originada por una fuga del amoníaco, componente químico habitual utilizado para refrigerar las cámaras frigoríficas de las plantas procesadoras de carne.

La indignación crece en la localidad y los familiares de las víctimas se están manifestando en las cercanías del edificio para exigir que el gobierno investigue las causas y los culpables de la tragedia, así como se investigue a los inspectores que supervisan el matadero.

Esta tragedia pone una vez más de manifiesto la grave inseguridad laboral que azota cual una plaga toda Asia de las que los últimos meses hay nutridas pruebas.

Jilin Baoyuanfeng Poultry es una compañía fundada en 2009 con 1200 empleados y que produce 67.000 tn de carne de pollo y que distribuye en 20 ciudades importantes de China, habiendo recibido numerosos premios por su contribución a la economía local.