Un principio básico de la bioseguridad es conocer al enemigo para no facilitarle las cosas, así debemos conocer que necesitan los insectos y en concreto las moscas para proliferar y convertirse en un problema serio.

Las moscas tienen una una especial predilección por los colores chillones y por los olores, estos últimos son especialmente atractivos cuando hablamos de animales muertos o sus restos y estiércol húmedo.

Los órganos del gusto se encuentran en las extremidades, es decir, las patas. Por eso se mueven sobre la comida para detectar lo más apetecible. Cuando lo encuentran simplemente bajan la boca, segregan una saliva y posteriormente absorven la sopa que han generado. Esto no tiene más inconveniente si no fuera porque la mosca ha nacido en el estiercol, y al nacer ya se llenan las extremidades de bacterias y virus que luego se posaran por las instalaciones, equipos y comida de la granja.

La hembra pone los huevos sobre materia orgánica rica y caliente que sirva de alimento a las larvas,  es decir, el estiercol. Las larvas  pasan por tres fases larvarias antes de hacer la pupa y posteriormente nacer el animal adulto. En condiciones adecuadas (35ºC) pueden hacer todo el proceso en 7 días o menos. A 15ºC estan por contra alrededor de unos 50 días.

Duración del ciclo según la temperatura

Así podemos observar que a las moscas les gusta:

• materia orgánica (conejos muertos, estiercol)
• humedad (la materia orgánica con humedad es más alimenticia para las larvas)
• Pienso en el suelo, si con humedad mejor (pienso o polvo del pienso)
• Piensos ricos en melaza o algarroba por ejemplo tienen un efecto atrayente para las moscas
• temperatura
• sin corrientes de aire
• protección contra el frio
• suciedad
• periodos de tiempo superiores a 20 días sin mover el estiércol

Por lo tanto hemos de evitar todo ello en la medida de lo posible.

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Información de la mosca

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