Denuncian prácticas engañosas en el etiquetado de productos cárnicos en la UE
Un estudio de la Organización de Consumidores Europeos (BEUC) denuncia las prácticas engañosas en el etiquetado de los productos a base de carne en la Unión Europea (UE), que incluyen la presencia de carne no indicada o la falta de mención de ciertos aditivos, según recoge una información de la agencia EFE. En dicho informe, a partir de los análisis llevados a cabo en siete países, incluido España, se pone de manifiesto que las etiquetas de los productos a base de carne «no son siempre fieles al contenido y que pueden resultar engañosas».
En concreto, el estudio -realizado entre abril de 2014 y agosto de 2015- denuncia que los productos no son etiquetados correctamente o no contienen todos los ingredientes. También se juega con el concepto de denominación, algo que puede confundir al consumidor sobre la calidad o el tipo de carne. Un ejemplo real en España ha sido un producto etiquetado como «la picada de ternera», que puede ser interpretada como ‘carne picada de ternera’ (es decir, un tipo de carne fresca), cuando en realidad se trata de un preparado cárnico.
Los casos analizados en España se han analizado gracias a la labor de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que ya detectó en una veintena de marcas de preparados de carne picada de vacuno un alto nivel de aditivos, así como analizó otras especies de carnes, como cerdo y ave, o con baja calidad e higiene deficiente. Además, productos como la hamburguesa son engañosos, porque el consumidor cree que está comprando un producto cárnico al 100%, cuando en realidad compran una preparación, con un contenido cárnico más bajo.
Entre las conclusiones del informe, una revisión de las etiquetas más estricta, con frecuentes inspecciones sobre el añadido de agua a los productos, y que este dato figure también en el etiquetado. Igualmente, se debe aclarar la diferencia entre «preparación cárnica» y «producto cárnico».