La eficiencia digestiva disminuye la producción de heces en pollos
Una selección aplicada sobre la eficiencia digestiva de los pollos permite disminuir la cantidad de estiércol producido manteniendo los mismos parámetros productivos
La eficiencia digestiva de los animales contribuye en gran medida a su eficiencia alimentaria y directamente mejora los resultados económicos de la explotación ganadera. Teniendo en cuenta este principio, en Francia se ha procedido a crear dos líneas divergentes de pollos seleccionando por su capacidad de eficiencia digestiva, alta o baja en el INRA. Después de tan sólo 8 generaciones aplicando las medidas de presión de selección, las diferencias de eficacia digestiva ya alcanzaban el 40% entre las dos líneas mostrando que este carácter de selección se puede integrar fácilmente en los patrones de selección habituales de las empresas dedicadas a la selección genética con unos resultados rápidos y importantes.
La selección de pollos para mejorar su eficacia o eficiencia digestiva permite abordar mejoras nutricionales que repercuten en una importante valoración de los nutrientes que son directamente más digestibles y aumenta su valor de energía digestible para una misma valoración de energía metabolizable teórica de la ración. Esto representa una importante mejora para los nutricionistas y un importante ahorro económico en el momento de realizar las raciones alimentarias.
Además de los siempre deseados beneficios económicos, no olvidemos que es el motor importante, hay una gran mejora en el impacto medioambiental que representa el obtener una disminución de las heces obtenidas en cada engorde de forma sensible, tanto de coste económico por la manipulación como por el volumen de residuos a procesar.
En un estudio con 600 pollos realizado en el INRA con la línea seleccionado por eficiencia digestiva frente a una línea comercial consiguieron reducir el 56% de lo excrementos frescos producidos y hasta el 61% de los excrementos secos. Una reducción que tiene una gran repercusión para el criador de pollos que tiene que limpiar las instalaciones en cada manada. Los parámetros genéticos ligados a la producción de residuos como la cantidad, proporción de nitrógeno y fósforo en el estiércol tienen una heredabilidad de moderada a alta (de 0,19 a 0,46) y podrían ser considerados en los esquemas de selección con facilidad.
De entre ellos, el parámetro que parece más sensible a ser tomado en cuanta es el relacionado con la cantidad de excrementos secos producidos por su alta heredabilidad y porque mantiene una buena correlación con las cantidades de Nitrógeno y Fósforo excretados y además son extremadamente sencillos de cuantificar y medir.
En los primeros estudios se aprecia que la superficie necesaria de tierras para aplicar los excrementos se reduce un sustancial 14% para el Fósforo y 17% para el Nitrógeno, una importante disminución de las tierras necesarias por explotación.
Además, siendo las correlaciones genéticas entre estos dos caracteres importantes, el peso no presentó ninguna diferencia y no afectó el crecimiento de los animales. En el estudio se pudo comprobar que el peso relativo de los compartimentos del estómago (proventrículo y molleja) aumentaron respecto a la línea comercial mientras que los compartimientos intestinales fueron inferiores en peso. El secreto de esta mejora parece radicar en este aumento de la retención gástrica y sus repercusiones fisiológicas y metabólicas sobre la digestión.
Por tanto, la selección de los animales por su eficiencia digestiva puede ser un medio muy eficaz de limitar la cantidad de heces excretadas por los pollos sin consecuencias sobre el crecimiento.
más información en http://www.inra.fr/Entreprises-Monde-agricole