Cuando se hace una encuesta a menudo se obtienen resultados un tanto sorprendentes, como la realizada en USA hace poco tiempo. Se han comparado dos encuestas realizadas una en 2003 y la otra en el 2013 preguntando a los consumidores la pregunta: «¿Cuánto considera que conoce usted acerca del cuidado de animales de abasto, aves, pescado, huevos, productores de leche y procesadores de alimentos?».

Se les pidió que calificaran su conocimiento como bajo, medio o alto. En 2003, poco más de la mitad de los consumidores calificaron su conocimiento de bajo alrededor del 30% y del 20% alta. En la misma encuesta del 2013, casi el 60% de los consumidores calificaron su conocimiento como medio, y alrededor del 20% bajo o alto. ¿Realmente los consumidores tienen más conocimientos o creen conocer más de ello?

Del mismo modo se pidió a los consumidores, «¿Qué importancia tiene el cuidado de los animales al decidir qué alimentos va a comprar, preferencia de marca y que tiendas comprar?».  Sólo el 18% de los encuestados dijo que el cuidado de los animales no afecta a su decisión, mientras que el 57% dijo que afecta en su decisión y el 25% dijo que afecta mucho a su decisión.

Al pedir a los consumidores que calificaran las cuestiones que eran importantes para ellos en sus decisiones de compra de alimentos,  pusieron la seguridad alimentaria en primer lugar, seguido por precio, ofertas del día, el bienestar animal, el medio ambiente, el origen del alimento y que esté libre de hormonas.

Centrando las preguntas en el sector de los huevos, los consumidores situaron la calidad del manejo de la producción de huevos en tercer lugar, detrás de la producción láctea y de piscifactorías, mientras que la situaban en segundo lugar en cuanto a seguridad alimentaria y en primer lugar como producción ganadera sostenible con el medio ambiente.