Una granja de pollos aislada de la red que opta por la fotovoltaica
La revista Energías renovables informa de una granja de pollos en Alfés (Lleida) que funciona con energía fotovoltaica, puesto que esta explotación se encontraba aislada de la red. El resultado es un sistema aislado con grupos electrógenos.
La apuesta por la energía solar fue una decisión muy meditada por los propietarios de la finca. En principio, después de que la administración local rompiera su promesa de llevar en 2008 el suministro eléctrico hasta la granja, se vieron obligados a decantarse por una instalación con grupos electrógenos. Con el paso de los años y la bajada de precios, la fotovoltaica se convirtió en la solución más competitiva para los avicultores. Finalmente, tras un estudio de viabilidad y un análisis de rentabilidad presentados por SUD Renovables, los propietarios de la granja de pollos hicieron una inversión de 85.000€ en la modificación del sistema de suministro eléctrico de la finca con la esperanza de recuperarla en los próximos 6 años.
La instalación aislada e híbrida con energía solar y diésel, de 30 kW de potencia, cubre más de la mitad del consumo, que ronda los 60.000 kWh al año, aproximadamente. Consta de 123 paneles fotovoltaicos (40.000 kWh anuales). La otra parte de la demanda energética la satisfacen, más o menos a partes iguales, los grupos electrógenos y las baterías solares.
Ahora los avicultores han conseguido reducir en gran medida los gastos de explotación, y además, gracias a la energía fotovoltaica, disminuyen el ruido producido por los grupos electrógenos, evitan la emisión a la atmósfera de casi 35 toneladas de CO2 -si lo comparamos con la generación de carbón- y ahorran 13.500 litros de gasóleo al año.