Nota de prensa
- El desabastecimiento provocado por la influenza aviar lleva al país norteamericano a abrir su mercado a huevos importados
- España, proveedor clave para EE.UU. por su volumen de producción disponible, la dimensión de las empresas y su estatus sanitario
La exportación de huevos españoles a Estados Unidos ya es posible.
Solo siete países en todo el mundo están autorizados, según la Agencia de Comercialización Agrícola de EE.UU. y situarse entre ellos supone un auténtico hito para el sector español.
INPROVO ha trabajado activamente con el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA), productores y compradores para conseguir el certificado sanitario que debe acompañar a los huevos. Los primeros contenedores saldrán de los puertos españoles en los próximos días.
La influenza aviar de alta patogenicidad ha obligado a sacrificar en EE.UU., desde diciembre de 2014, el 10% de sus gallinas ponedoras (unos 35 millones) según el Departamento de Agricultura (USDA), lo que ha generado una situación de desabastecimiento con precios récord del huevo en el mercado.
Este organismo prevé para 2015 una caída en la oferta del 4% respecto al año pasado (8.100 millones de docenas) y un volumen de importaciones que ascenderá a 41,4 millones de docenas, con precios medios del huevo de hasta 1,80 dólares por docena en el último trimestre del año. Se estima que la producción de huevos tras la influenza aviar recuperará sus niveles normales en un plazo aproximado de un año.
Los fabricantes de ovoproductos norteamericanos necesitan materia prima para cubrir las necesidades de sus clientes y la Unión Europea, segundo productor de huevos mundial, es su principal alternativa por la compatibilidad de requisitos sanitarios y productivos. Las características de la producción española hacen de nuestro país un candidato de primer orden para satisfacer parte de esta demanda.
España es uno de los principales exportadores de huevos de la UE, por su alto nivel de autosuficiencia y volumen de producción.
Además, el Modelo Europeo impone normas muy exigentes a los huevos y ovoproductos comunitarios, y son apreciados en el mercado exterior por su calidad y seguridad. La dimensión de sus empresas, la posición estratégica del país para el transporte marítimo y su estatus sanitario (no ha sufrido ningún brote de influenza aviar en los últimos años) hacen del sector de puesta español uno de los más competitivos de la UE.
Desde 2013 el incremento de la oferta de huevos europea (principalmente en Italia, Alemania o Francia) ha mantenido el mercado comunitario con precios de origen a la baja. “La demanda de huevos europeos por parte de EE.UU. ha cambiado completamente el panorama”, explica la Directora de INPROVO (Organización Interprofesional del Huevo y sus Productos), Mar Fernández. “España es uno de los pocos países de la UE con excedentes, exportamos el 23% de nuestra producción en 2014, y por ello los norteamericanos están comprando huevos aquí”, añade. Esto supone un balón de oxígeno para los productores, ya que las inversiones acometidas en las granjas para aplicar en 2012 la normativa de bienestar han supuesto un importante endeudamiento para la mayoría de las empresas.
Tras el éxito de la gestión del certificado sanitario para EE.UU., el plan de internacionalización de INPROVO en 2015 contempla ampliar nuevos mercados en países terceros, muchos de los cuales se han quedado sin abastecimiento puesto que importaban huevos y ovoproductos del país norteamericano. Desde 1995 España es un exportador neto de huevos que ya suministra a más de 20 países en la UE, África, Asia y América.
INPROVO agrupa a asociaciones de ámbito nacional representativas de las empresas del sector del huevo (productores, industrias y comercialización). Constituida en 1997, y reconocida por el Ministerio de Agricultura, sus objetivos son: promocionar y difundir el conocimiento de los huevos y sus derivados, promover actuaciones que faciliten una información adecuada a los intereses de los consumidores y mejorar la calidad de los productos y los procesos que intervienen en la cadena agroalimentaria.
Desde julio de 2014, INPROVO desarrolla la campaña de servicio público “El huevo, de etiqueta” con el objetivo de explicar a los consumidores cómo se producen los huevos que consumen, de acuerdo a los exigentes estándares del Modelo Europeo de Producción, así como la información que ofrecen el marcado y etiquetado del huevo.
Para más información:
www.inprovo.com
www.magrama.gob.es