Dejando las definiciones de bioseguridad, que las hay para todos los gustos, más acertadas algunas que otras, actualmente no hay discusión de la necesidad de realizar medidas protectoras de prevención para la entrada de microorganismos patógenos que afectan a los animales que tenemos en la instalación.
El campo de batalla es amplio y continuamente entran conceptos nuevos estando por tanto en continua expansión, no sólo ampliando líneas ya conocidas, sino que desarrollando otras que anteriormente ni se tenían en cuenta.
Las líneas más clásicas de control de bioseguridad se basan fundamentalmente en:
- Control del agua
- Control de plagas de roedores
- Control de plagas de insectos
- Limpieza y desinfección
- Vallas perimetrales y impedimentos para evitar la entrada de depredadores
- Control del acceso con el libro de registro de visitas
- Control del alimento
Es conveniente conocer donde se encuentran los puntos críticos o fallos en la bioseguridad de la instalación, y su búsqueda no es sinónimo de encontrar defectos, ni de demostrar nada, sino simplemente de localizar aquellos puntos críticos en que existe un riesgo, sea alto o bajo, donde se nos pueda colar una patología.
En esta búsqueda de puntos críticos o de riesgo es frecuente encontrar situaciones que simplemente por desconocimiento no se conocía, pero que al plantearlo y fijar problemas no habituales aparecen claras. Las consecuencias de realizar esta búsqueda de defectos es que a ninguno de nosotros nos gusta que nos los encuentren por que da la sensación de que hacemos las cosas mal (yo el primero que me pasa).
Entonces ¿ de qué otra forma podemos valorar nuestra bioseguridad?
Esperar a ver si entra un proceso y desentrañar por donde ha entrado posteriormente no es la situación idónea. Para valorar la situación de la instalación no hay nada mejor que realizar unos test donde simplemente respondiendo a las preguntas lo más sinceramente posible podemos determinar dónde estamos y cuáles son los puntos a mejorar.
Como en todos los test, estos son amplios y poco dados a tener amplitud de márgenes en casos especiales, pero poniendo buena voluntad podemos acercarnos bastante a una situación adecuada y detectar puntos de riesgo. Aquí va el test simplificado que personalmente utilizo como base para empezar a analizar una explotación, considerando que no es específico y que algún parámetro no es de aplicación en ocasiones.