El aislamiento de una nave es primordial para conservar la temperatura ambiental idónea. Para medirlo hemos usado cámaras termográficas que escanean el comportamiento térmico del edificio. La ausencia de puentes térmicos es clave para asegurar la eficiencia energética de la nave.
Son cuatro los tipos de materiales que se emplean habitualmente en la construcción de naves avícolas: poliuretano proyectado, poliuretano inyectado entre dos capas de distintos materiales (formando paneles), poliestireno extrusionado y fibra de vidrio. El primero es el material más empleado en los últimos años, aunque últimamente está sufriendo un descenso en su uso a favor del poliuretano inyectado o paneles sándwich (paneles tipo Pural), debido a su facilidad de instalación. El formato de fabricación en placas del poliestireno extrusionado (poliespan de alta densidad) se usa casi exclusivamente en las naves de obra colocándolo en la cámara de las paredes.
Y por último, tenemos la fibra de vidrio, la opción utilizada por COSMA en sus características naves tipo túnel con cubierta curva, que se utilizan debido a su excelente resistancia térmica (R=3,63 por 16cm de espesor). En las distintas tomas termográficas se demuestra esta capacidad de aislamiento.
El análisis termográfico
La termografía nos permite captar la radiación infrarroja del espectro electromagnético.El análisis termográfico se ha realizado visitando distintos tipos de explotaciones agrícolas. Observamos la presencia de puentes térmicos, zonas donde se escapa el calor, y los posibles fallos en el aislamiento, en la estanqueidad de las naves. Demostramos como las naves tipo túnel construidas con fibra de vidrio, no presentan estos puentes térmicos.
La fibra de vidrio que se revela como el material más óptimo frente al aislamiento es de origen natural, mineral, inorgánico, y está compuesta por un entrelazado de filamentos de vidrio aglutinados mediante una resina ignífuga. La fibra de vidrio se suministra en forma de mantas y paneles; cuando se instala una sola capa se pueden originar pérdidas térmicas. Por eso, cuando se realiza una instalación de este tipo, COSMA instala dos mantas a matajunta, eliminando cualquier posible puente térmico en toda la superficie de la cubierta. Además, al ser una única pieza (en lugar de placas), evita que el calor se pierda por las juntas. A partir de los resultados obtenidos mediante el uso de la termografía con el estudio de los puentes térmicos, se observa que este tipo de cubierta aísla hasta tres veces más que una nave clásica, lo que se traduce por un lado, en un aumento del bienestar animal y por otro lado claramente se traduce en un menor gasto en calefacción.
Además, a su alta capacidad de aislamiento térmico hay que sumarle el aislamiento acústico. Asimismo, el diseño curvo de la cubierta se integra mejor en el paisaje, siendo más aerodinámico, ofreciendo menor resistencia al aire.
Information! Las naves COSMA aíslan casi dos veces más que las naves clásicas.
Nota: Con la actual tecnología en equipos (ordenadores, ventilación y calefacción) conseguimos hacer funcionar todas las naves del mercado, pero siempre a costa de un elevado «peaje energético». Todas las naves tipo túnel de COSMA pueden ser equipadas con cualquier tipo de ordenador y material para realizar un manejo sencillo de los animales.