El Pleno del Parlamento Europeo aprobó ayer una resolución sobre el etiquetado de las carnes de cerdo, ovino, caprino y aves. La resolución salió adelante con 368 votos a favor, 207 en contra y 20 abstenciones.
Las nuevas medidas obligan a indicar el país de sacrificio y el país donde ha sido criado por un cierto periodo de tiempo. Según la resolución, estas normas pueden inducir a la confusión al consumidor. Los eurodiputados quieren un etiquetado similar al que está vigente en la carne de vacuno, de manera que también sea obligatorio especificar el lugar de nacimiento de los cerdos, ovejas, cabras y aves de corral.
El etiquetado en la carne de vacuno se empezó a aplicar el 1 de enero de 2002, a raíz de la crisis de la EBB. En sucesivas ocasiones, los europarlamentarios han solicitado que este tipo de identificación se extendiera al resto de las carnes. Los eurodiputados también han pedido a la Comisión que elimine las excepciones para la carne picada y los recortes.
En diciembre pasado se publicó el Reglamento nº 1337/2013 con las normas para el etiquetado obligatorio del país de origen o lugar de procedencia de la carne fresca, refrigerada y congelada de cerdo, ovino, caprino y ave. Entrará en vigor a partir del 1 de abril de 2015 y establece que en la etiqueta se indicará, de manera obligatoria , el país de cría y el país de sacrificio, de acuerdo con un detallado conjunto de reglas.