Los expertos han detectado el primer caso de transmisión humana de la variante H7N9 de la gripe aviar descubierta en China, según un informe publicado en la revista British Medical Journal (BMJ). Se trata del caso de una mujer de 32 años que enfermó tras cuidar a su padre, que contrajo el virus al visitar un mercado de aves en China.
Hasta el momento no había pruebas de que una persona pudiera contagiarse de gripe aviar de otro enfermo, pues todos los casos localizados hasta ahora correspondían al contacto con aves. A diferencia de su padre, la mujer no había estado en contacto con aves y enfermó unos seis días después de cuidarlo, muriendo los dos en el hospital.
La variante H7N9 fue detectada en China el pasado febrero y oficialmente a principios de julio se contabilizaban 133 personas afectadas en el este de China, 43 de las cuales murieron. En la mayoría de los casos la gente había visitado mercados de aves de corral o estaban en fuerte contacto con estos animales.
En este caso descrito, el padre de la mujer, un hombre de 60 años, enfermó entre cinco y seis días después de visitar un mercado de aves y sus síntomas fueron fiebre y dificultades para respirar, lo que obligó a su hospitalización en cuidados intensivos. Su hija, que no tenía ningún problema de salud, cuidaba de su padre antes de que él fuera hospitalizado y, al igual que él, también debió ser ingresada con los mismos síntomas. Las investigaciones posteriores indicaron que los dos tenían un virus genéticamente idéntico y que la fuente más probable de infección fue mientras cuidaba a su padre cuando estaba enfermo.
En este caso descrito, el padre de la mujer, un hombre de 60 años, enfermó entre cinco y seis días después de visitar un mercado de aves y sus síntomas fueron fiebre y dificultades para respirar, lo que obligó a su hospitalización en cuidados intensivos. Su hija, que no tenía ningún problema de salud, cuidaba de su padre antes de que él fuera hospitalizado y, al igual que él, también debió ser ingresada con los mismos síntomas. Las investigaciones posteriores indicaron que los dos tenían un virus genéticamente idéntico y que la fuente más probable de infección fue mientras cuidaba a su padre cuando estaba enfermo.
Del mismo modo en la publicación aseguran que el contagio de la hija no significa en absoluto que el virus haya desarrollado la capacidad de transmitirse entre humanos