La nueva normativa, que regula la amplia variedad de productos y recetas de la cocina china, impone criterios científicos y tecnológicos a la seguridad alimentaria de los alimentos tanto de nuevos productos como de viejos.
Del mismo modo, a fin de evitar fraudes, la regulación establece que en caso de falsedad documental en la solicitud de un permiso no se podrá repetir la solicitud hasta pasado un año. La regulación entrará en vigor a partir del primero de octubre, y reemplazará a la que fue divulgada el primero de diciembre de 2007.