La nueva cepa de gripe (H7N9) aparecida en china requiere un especial esfuerzo en bioseguridad, según la FAO.
A diferencia de otras cepas, este nuevo virus es difícil de detectar en las aves de corral debido a que causa muy pocos signos de enfermedad en los animales. De esta forma los ganaderos, y todo aquel que trabaje con aves, pueden estar expuestos sin darse cuenta con suficiente antelación. Es por este motivo que conviene extremar la bioseguridad.
Entre las medidas a implementar se incide en:
- Mantener todas las aves y el ganado separados de las personas y viviendas.
- Mantener las aves silvestres lejos de las aves de corral y de otros animales, además de mantener a los animales separados por especies.
- Informar a las autoridades sanitarias locales ante la aparición de animales enfermos o muertos.
- Lavarse las manos con frecuencia para matar y eliminar el virus.
- Comer la carne correctamente cocinada, no comer animales enfermos o muertos, ni utilizarlos como alimento para animales.
- Ir al médico ante sospecha de enfermedad.
- Ante un brote en los animales se recomienda el sacrificio de los mismos.